jueves, 1 de septiembre de 2011

Preponderantemente añeja y avanzo


Me abrazo a la luna
con un grito desesperado
que ha desgarrado mis entrañas:

"¡NO HE MUERTO!"

Lo sé y me corroe,
me putrefacta las experiencias sádicas
del dos por hora.

"¿Acaso es la aurora?"

Despierto sobresaltada
con un niño en los brazos
que bosteza y devora el aire.

"¡NO HE NACIDO!"

Nada de lo que he hecho
ha servido para salvarme
de los años que me dejan deambulante.

No hay comentarios: