lunes, 26 de mayo de 2008

999


¡Dama, Dama!
999 máscaras caídas
¿Dónde te esconderás, Dama?
Sólo una te protege ahora
de la luz que vulnera
y te vulnera el abismo del alma.
¡Ay!, Dama,
no pierdas la calma,
al menos resta una todavía,
sólo esperemos que resista
sostenida de tus pestañas.
999 máscaras caídas, Dama,
¿qué harás sin todas ellas?
¿Dónde guardarás los ojos
sucios de melancolías
cuando la última que queda
se vaya por tierra hasta el Estigio?
Dama ¡Ay!, Dama mía,
¿qué será de tus lamentos
que sólo conocían los oídos
de cera magra y pura?
¿Qué será de esa piel blanca,
pálida, casi translúcida
que protege tus venas?
999 máscaras, Dama,
y ahora sólo te queda una.

2 comentarios:

Carolina Restrepo dijo...

me encantó visitarte, un gran escrito, saludos Sol

Umbras Monstrator dijo...

Chas gracias, Caro.

Saludos.